Bajo las sábanas la palidez de nuestros cuerpos se volvió rojo encendido, rosaceo carnal de deseo hermanado y roto por la grieta de su cuerpo.
Balancín que se volvió inestable y terminó en la horizontal del temblor ascendente del cielo divino a modo de Greco distorsionado con ojos blancos.
Antonio...
26.3.11
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Y ahora se que fue mentira, poetica absurda...de un momento absurdo donde el corazón y la mente estaban lejos de mi...
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